Este bosque es acogedor, los árboles no están ni demasiado juntos ni demasiado lejos, dejando entrar la luz del sol y abriendo un nuevo lugar de vez en cuando, un pequeño estanque o un manantial ágil, un claro en flor. Pequeños habitantes de este bosque susurran aquí y allá, dándote la sensación de que estás a punto de entrar en un reino de hadas de gnomos que te invitan a su festín.