La guitarra eléctrica, acompañada de guitarras rítmicas, sintetizadores, percusión, órgano y bajo, se presenta con su melodía melancólica y poderosa, evocando el gran estilo progresivo. El audio de este bucle no está "intensificado", para preservar cada matiz del sonido y permitir a los oyentes ajustar el volumen según sus necesidades.